Importante :
En algunos textos he ofendido a otras personas injustamente, por eso pido disculpas por mi comportamiento inapropiado. Aun así, estos textos forman parte de lo que soy, y es por eso que no puedo borrarlos. Solo me queda aprender de mis errores, disculparme otra vez, y a seguir adelante.
viernes, 8 de junio de 2012
Arte y Exorcismo
Me siento desolado otra vez. Una vez más pienso y trató de
entender por qué elegí estar solo. Esta mañana cuando me levanté, se me ocurrió
que probablemente mi elección haya tenido que ver con una cuestión existencial,
más próxima al desarrollo de mi creatividad. Como siempre dije, una cosa se
lleva dentro de la otra. Así es que de muy niño, tuve la peculiar impresión de
que un hombre en soledad, cuando es invadido por el aburrimiento, casi siempre
entra en estado de desesperación, sensación que es muy diferente a lo que uno
percibe cuando está en compañía de alguien más. Ahora bien, esa desesperación
de la que hablo, es motivadora y movilizadora de diferentes necesidades. La
primera es la de buscar resolver la angustia, a partir de una compañía que ayude
a estabilizar esas emociones. Y la segunda es la de sentarse sólo, para
comenzar a buscar por uno mismo, los medios necesarios para equilibrar
nuevamente el estado anímico, y así poder recuperar la felicidad perdida.
Claramente se observa que en estos dos casos, hay dos tipos de soluciones que
son a su vez, perfectamente opuestas. La primera corresponde a las personas
extrovertidas, mientras que la segunda tiene mayor afinidad hacia el género
introvertido. En mi caso siempre consideré la introversión como una lucha
interior que ayuda a poner en funcionamiento los motores del pensamiento,
gestando así, una nueva autosuficiencia que va creciendo con el correr de los
años. Aquí no hablaré de la extroversión y sus características, porque
francamente estaría entrando en un terreno más intuitivo, del cual casi no he
formado parte. Con esto no quiero decir que carezca de contacto social, claro
que lo tengo. Sin embargo prefiero estar en mi propia compañía, aun cuando me
sienta débil y angustiado. Esta elección tiene lógica para mí, pues el malestar
funciona en mi caso, como un combustible apropiado para la creación. En este punto
también observó que cuando trabajo a partir del dolor, el producto que genero,
es también una prolongación de ese malestar. Por eso es que el arte es un medio
de expresión que nos permite hacer una suerte de exorcismo, que nos ayuda a
liberar todo lo que llevamos adentro, materializándolo exteriormente. Ahora
mismo, mi cuestionamiento acerca de la soledad, me está llevando a buscar en mí
interior, las razones que han motivado todas mis elecciones a lo largo de estos
últimos años, y la única respuesta que he hallado, se encuentra en el
significado de este texto. Por eso sostengo que la soledad es solo un medio que nos ayuda a entendernos a nosotros mismos.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario