Si bien no puedo escuchar lo que sale de tu voz, quisiera
preguntarte. ¿A quién le hablas? ¿Me hablas a mí? ¿Te importa lo que pienso?
¿Qué esperas que diga, acaso crees que puedo responderlo todo? ¿Acaso alguien
puede hacerlo? Creo que para sentir a veces hay que enjuagar la cabeza en la
zanja de los recuerdos. Lo único cierto es que hoy vi como unos árboles se
agitaban coreográficamente con el viento, destruyendo a su paso, cualquier
estupidez del hombre.
Quisiera al menos que tuvieras en cuenta que no por gustarme
la soledad, estoy exento del dolor que esto implica. Bien me debería resultar
fácil describir lo que siento entonces. Seguramente de alguna forma estar solo,
es similar a conformarse con lo que nos pasa, naturalizando cada angustia como un suceso imposible de evadir. Cuando uno está solo, es
común volverse perezoso, de forma tal que solo trabajamos cuando la necesidad
así lo indica. Por otra parte nos acostumbramos a desasnar y justificar nuestra
profunda necesidad de silencio, con el único objetivo de serenar las ideas.
Sabemos que hay una carencia, pero por otro lado también existe una realidad
que nos ha llevado a tomar esta decisión. Ignorar o no sus razones, dependerá
de cuan fuerte sean nuestras convicciones sobre el asunto. Por supuesto que a
medida que más nos alejamos de la niñez, más fuerte se vuelve la necesidad de
encontrar alguien en quien poder confiar. Sin embargo así como es fuerte la
necesidad, también es fuerte la nostalgia por todo lo que hemos hecho.
Seguramente, tú estarás leyendo esto desde algún futuro que yo hoy no puedo
imaginar. Por esa razón quisiera saber. ¿Es acaso la felicidad algo que vuelve
mejor al hombre? ¿Te sientes más fuerte ahora que puedes compadecer a quienes
no tienen pareja y están solos en el mundo? Si es así como entonces se dieron
las cosas, no me queda ya más nada por decirte, dado que la verdad es que no me
gusta que me compadezcan. Supongo que a medida que veo pasar el tiempo, mi vida
va siendo cada vez más caótica. Duermo mucho, como demasiado, y a medida que
pasa el tiempo también es cierto que trabajo menos. Por eso aunque no me guste hacer el papel de víctima, creo que por otro lado lo merezco. Se hace probable
la sospecha de que no quiera reconocer que la disconformidad solo se resuelve
obteniendo lo que anhelamos. Pero entonces pregunto, ¿estamos seguros de que
obteniendo lo que anhelamos, dejaremos el dolor atrás? La verdad es que no lo
sé. Lo que sí sé, es que ningún anhelo puede sostener en el tiempo, los cambios emocionales que suceden en el interior del hombre. Quizás quemarme una y otra vez sobre la misma herida haya
sido un error. Ahora dime, ¿Cómo se siente tener aquello que tanto soñabas? Si
acaso has encontrado el amor, me gustaría que enviaras al pasado una
descripción de esta persona, solo para saber si ella es lo que imaginábamos.
Más que ningún otro atributo, me gustaría saber si entonces le gusta el arte.
Dime pues, ¿tiene valores morales, o simplemente se comporta impulsivamente?
Quisiera saber si sabe dar valor a su sufrimiento, o suele compensar sus
carencias comprando ropa nueva en el shopping. Me pregunto si te acordarás de
mí de vez en cuando, pues imagino que ahora ya no tienes tiempo para mirar a
atrás. Más allá de todo, ahora que has abandonado tu soledad, nada más quisiera
yo, que me dijeras si todo lo que hasta entonces hemos hecho, te ha servido de
algo. Pues si no es así, ya no sé qué hago aquí escribiéndo.
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