Importante :

En algunos textos he ofendido a otras personas injustamente, por eso pido disculpas por mi comportamiento inapropiado. Aun así, estos textos forman parte de lo que soy, y es por eso que no puedo borrarlos. Solo me queda aprender de mis errores, disculparme otra vez, y a seguir adelante.

domingo, 14 de abril de 2013

Espíritu Anónimo

Contra esta indiferencia, y a favor de mí mismo, he tenido que destruir todos los sentimientos que impidieron mi ascenso. Para ello he resuelto dividir las partes en dos niveles. El dolor y el deseo. Entiendo que probablemente esto no sea lo correcto, pero estoy convencido de que solo así podré averiguar cuan fértiles fueron mis alucinaciones. Pienso que entre el bien y el mal, existe un espíritu anónimo cansado de buscar su origen. Este ser, Indignado por todos los idiotas que exigen presencia en el futuro, ha decidido borrar su nombre de toda duda. Pues esos mismos que se hicieron llamar fieles, hoy siguen queriendo atribuirse sus logros. Bajo este viejo trozo del pasado, su presencia admirable, supo mutilar esa virtud, que ni las cuadrillas organizadas pudieron eximir. ¿Pero de qué sirve recordar su legado, si aquellos mismos que quisieron salvarlo, no supieron sostener frente al vacío, la esperanza de una ilusión perdida? ¿Será entonces que el desinterés y la inseguridad, palpitaron codo a codo, junto a ese símbolo, que con la fuerza de su causa, pudo abrirle las puertas a eso que nadie quería ver? Sea como fuere, ya es tarde. Pues la desaventurada historia, exportó sus pesares, antes de que él lograra su cometido. Por esa razón no puedo quedarme callado. Al menos no esta vez. Seguiré recordándolo en tanto que la plebe, no aprenda a comprender su miseria. Y si bien ellos jamás reconocerán lo crueles que han sido, yo seguiré confiando en este tiempo que nada olvida y que todo pregunta. Ese mismo tiempo que ha sabido encontrar en sus hojas, aquella lagrima noble que supo llorar sangre ante su osado valor. Quisiera pedir abiertamente a los reprimidos que utilicen este contenido, como él hubiera querido que lo hicieran, pues mientras su espada resista el destierro de aquella gloria, jamás nadie podrá tragar aquel veneno que fue dueño de semejante martirio.

lunes, 8 de abril de 2013

El Sórdido Acento del Engaño

¿Quién soy yo? ¿Porque soy atemporal en mi tierra y me deformo tras los que me persiguen? Preferiría que no se supiera tan rápido de mí, pues vaya donde vaya, el sol también alumbra a los distraídos. Observa a esas figuras que revelan una pregunta en caída. ¿Quiénes son? ¿A qué vinieron? Espero con entusiasmo el momento oportuno para desfigurar su búsqueda. Dado que de alguna manera mi espera, no tiene relación alguna con este perfume que hay en el aire. Tal vez debería ser más práctico y exponer mi verdad de acuerdo con lo próximo a descubrir. Creo que sólo me llevará unos segundos suspender mi deseo de los cuestionamientos que hace mi mente. Pues me resulta familiar como inyectas en tus venas ese temor por lo indefinido. Te veo avanzar frente al desahogo de tu vejez, y empiezo de nuevo a resucitar mi conciencia. ¿Qué diferencia puede haber entre descubrir una fuerza sin alma, y encubrir una voz que interfiere con tu llamado? Estas manos deben ser las de alguien más, pues adulteran mi alegato. Estoy queriendo oponerme a toda duda, mientras observo cómo se definen mis creencias más valiosas. Simplemente no puedo ser indiferente a esto, pues algo aquí me define como nada lo ha hecho antes. Más que un concepto es un porqué, una noticia torpe que participa activamente de mi mundo ajeno. ¿Puedo comenzar a ser quien soy, sin dejar de ser esto que se deja ver? No hay ninguna prueba que me incrimine. Pero bajo estas circunstancias, sé que debo disfrazar mis intenciones para que mi futuro no caiga en contradicción. Igualmente he venido a reclamar mi agonía. Ya sabemos que mi eco, ha manifestado su palabra, antes que el deseo humanizara su nombre. Oscilar frente al vacío y exigir por un sórdido acento, han sido mis herramientas más eficaces. Sin embargo he visto tu forma declinar con aquel jugo que derraman los cuervos. Sé paciente, y por nada del mundo sirvas al engaño, dado que si lo haces, no habrás de obtener precio por tu sangre. Sé paciente y observa como tú intuición se agudiza. Así verás cubrir tu párrafo con el amanecer que ha rellenado el cielo bajo aquel cuerpo que te obsesiona. Sólo así llegarás a ocupar la franja que divide el mundo de los que ven, con el mundo de los que sienten. Deberás existir a través de ti, para descubrir el amor que ha dinamitado la raíz del asunto. Sé tu propia experiencia, cobra vida y tiñe de azul la palabra que buscas encontrar. Sigue siendo tan útil y práctico como hasta ahora, pero cuando llegue tu crisis, no dejes morir tu prosa, pues ella gusta de quienes no eluden sus desafíos. Si este tiempo no fuera cruel, su seriedad no haría mayores diferencias. Pero ya ves que las hace. Así que tu deber, sabe con absoluta certeza la cabeza que debe cortar. Extrae de ella lo que fuere sin pedirle permiso, pues sólo así la plebe entrará en admisión con ese inmenso sacrificio que ha significado encontrar tu credo.